En la Traducción del Nuevo Mundo cada vez que la palabra griega “proskuneo” se utiliza en referencia a Dios, se traduce como “adorar” (Ap 5:14, 07:11, 11:16, 19: 4, Jn 4,20, etc…). Cada vez que “proskuneo” se utiliza en referencia a Jesús, se traduce como “rendir homenaje” (Mt 14:33, 28: 9, 28:17, Lc 24:52, Hebreos 1: 6, etc.), a pesar de que es la misma palabra en griego. Especialmente comparando la palabra griega “prosekunhsan” que se utiliza con referencia a Dios en Rev 5:14, 7:11, 11:16 y 19: 4 y  que se utiliza con referencia a Cristo en Mt 14:33, 28: 9 y 28: 17. ¿Cuál es la razón de esta contradicción? Si la TNM fue consistente en la traducción de “proskuneo” como “adoración”, ¿Cómo deberían ser leídos los versículos relacionados con Cristo?

RESPUESTA – La palabra griega proskyneo puede ser traducida como inclinarse ante Dios o también puede ser usada para describir el acto de inclinarse en sumisión a una persona con autoridad, como un rey. Jesús usó la palabra en Mateo 18:26 en una ilustración que habla de un esclavo inclinándose ante un rey humano. Obviamente, en esta historia Jesús no tenía la intención de decir que el esclavo estaba haciendo un acto de adoración.

De Jesús mismo se dice que cayó sobre su rostro postrándose ante Dios en el jardín de Getsemaní momentos antes de su detención.

En el caso de los que hicieron reverencia a Cristo, estos no estaban suponiendo que Jesús era Dios, como muchos trinitarios equivocados quieren hacernos creer. Tomemos, por ejemplo, Mateo 14:33 (citado en la pregunta). Esa fue la ocasión en que Jesús caminó sobre el mar agitado por la tormenta, el texto dice así: “Entonces los que estaban en la barca le rindieron homenaje, y dijeron: ‘Verdaderamente eres Hijo de Dios’. ’’

Si los discípulos se imaginaban que Jesús en realidad era Jehová Dios, ellos lo hubieran dicho. Pero no lo hicieron. Expresaron su convicción de que Jesús era el Hijo de Dios.

Otro “texto de prueba” ofrecido es Hebreos 1: 5-6, que dice: Por ejemplo, ¿a cuál de los ángeles dijo él alguna vez: “Tú eres mi hijo; yo, hoy, yo he llegado a ser tu padre”? ¿Y otra vez: “Yo mismo llegaré a ser su padre, y él mismo llegará a ser mi hijo”? Pero cuando introduce de nuevo a su Primogénito en la tierra habitada, dice: “Y que todos los ángeles de Dios le rindan homenaje”.

El pasaje de Hebreos está en un contexto completamente diferente. Dios declaró que Jesús era su Hijo  el día en que fue bautizado y ungido con espíritu santo para ser el Mesías. Sin embargo, Pablo estaba contrastando la gloria y la autoridad que Jesús tendrá cuando esté de regreso, o como Pablo escribió: “ cuando (Dios) introduce de nuevo a su Primogénito en la tierra habitada’’

Por lo tanto, cuando Cristo se sienta en su trono, Dios exigirá a todos a someterse a él, incluyendo a los ángeles. Sin embargo, es importante tener en cuenta que Dios ordena a sus ángeles  adorar a su hijo en algún momento en el futuro. Es evidente que los ángeles siempre han adorado a Jehová. Pero cuando Jesús se convierta en Rey, se requerirá que los ángeles se inclinen ante él como el Hijo más honrado de Jehová.

Mientras que los testigos de Jehová están actualmente bajo la ilusión de que Jehová ya ha introducido a su Primogénito en el mundo otra vez, este no es el caso. La venida del Hijo del hombre va a traer consigo un nuevo desarrollo en la relación del pueblo de Dios con él. Entonces Jesús recibirá la adoración, pero no porque él es Dios, sino porque Dios así lo ordenará. Es por ello que en el Apocalipsis una visión presenta a  los 24 ancianos rindiendo homenaje al Cordero que está en medio del trono.