Actualmente ha pasado casi un siglo desde que Charles Taze Russell hizo el gran anuncio que decía: “Los Tiempos de los Gentiles han terminado. Sus reyes han tenido su día’’. Durante casi cuatro décadas antes de ese fatídico año, la Atalaya de Russell había estado apuntando hacia 1914 como un año marcado en la profecía, el cual vería el comienzo de la anarquía y colapso de la civilización.

Cuando el archiduque austriaco, Francisco Fernando, junto con su esposa Sofía fueron asesinados en Sarajevo el 28 de junio, esto dio lugar a que todas las grandes potencias de Europa se aliaran en dos bloques distintos y se declararan la guerra entre sí en cuestión de unas pocas semanas, preparándose así el escenario para el baño de sangre que se conoció como la Primera Guerra Mundial. Estos acontecimientos trágicos llevaron a C. T. Russell a  hacer su anuncio histórico el 2 de octubre de ese año.

Por supuesto, la civilización no colapsó en ese entonces. Y la Gran Guerra no se convirtió en la batalla de Armagedón, como los Estudiantes de la Biblia habían estado esperando con impaciencia. Y los reyes gentiles, cuyo “día” supuestamente había llegado en 1914, han dominado al mundo desde entonces de una manera que habría sido difícil para cualquier persona que vivía en aquel tiempo imaginar. Curiosamente, sin embargo, el año 1914 se ha convertido en la fecha más importante de toda la historia humana en la mente de los testigos de Jehová.

A pesar de las expectativas frustradas de aquellos primeros Estudiantes de la Biblia, en 1930 J. F. Rutherford, sucesor de Russell como presidente de la Sociedad Watchtower, hizo una revisión profunda de la escatología de la organización. Anteriormente, a los Estudiantes de la Biblia se les había enseñado que Jesús había comenzado su presencia invisible en 1874, convirtiéndose en rey también. No obstante, sin ningún aviso, en 1930 la Watchtower cambió la fecha del principio de la presencia de Cristo a 1914.

La Atalaya, por supuesto, ha pasado por alto en gran medida este “ajuste”, como si se tratara de un asunto trivial. Pero los testigos de Jehová harían bien en hacerse esta pregunta: ¿Es la poderosa parusía de Jesucristo de tal naturaleza que su llegada puede ser cambiada como si se tratara de algo insignificante?

Este “ajuste” revela que desde el principio, la directiva de la organización anunció una falsa parusía de Cristo. Este no es un detalle insignificante de la historia de la Watchtower dado el hecho que el propio Jesús predijo que muchos vendrían en su nombre falsamente declarando: ‘’ Se ha acercado el tiempo debido’’.  La Watchtower incluso publicó un libro hace casi cuarenta años titulado ‘’ El Reino de Dios de Mil Años Se Ha Acercado’’.

Para ampliar lo que Cristo había predicho, el apóstol Pablo emitió una advertencia profética dirigida a los cristianos, recomendándoles que no se dejaran seducir en modo alguno por  anuncios de autoridad, ya sea escritos u orales, anunciando la parusía y el día de Jehová. Pablo pasó a explicar cómo Satanás haría grandes señales y maravillas y utilizaría todo tipo de engaño injusto para dar crédito a un hombre del desafuero, que es la fuente de las declaraciones apostólicas que afirman que la presencia de Cristo y el día de Jehová ya han comenzado.

Así, 1930 fue sin duda el comienzo de un fenómeno predicho en la profecía que ha continuado hasta el día de hoy. ¿Cuál es ese fenómeno? ¡Un enlucido con lechada en un muro simbólico! Sin lugar a dudas, la doctrina de 1914 es como un edificio imponente en la mente de los testigos de Jehová. La Sociedad cuenta con frecuencia sus grandes ideas para discernir tales asuntos esotéricos. Muchos de los testigos de Jehová están intimidados por la destreza interpretativa aparente de la Watchtower.

Pero de acuerdo a la profecía en el libro de Ezequiel los líderes del pueblo de Dios erigen un muro de separación y lo empañetan con capas sobre capas de cal. La profecía se dirige contra “los profetas de Israel”, a quienes Jehová denuncia y dice: ‘’ Esto es lo que ha dicho el Señor Soberano Jehová: “¡Ay de los profetas estúpidos, que andan tras su propio espíritu, cuando no hay nada que hayan visto! Como zorras en los lugares devastados es lo que han llegado a ser tus propios profetas, oh Israel. Ustedes ciertamente no subirán a las brechas, ni edificarán un muro de piedra a favor de la casa de Israel, para estar de pie en la batalla en el día de Jehová”. “Han visto en visión lo que no es cierto y [lo que es] una adivinación mentirosa, los que están diciendo: ‘La expresión de Jehová es’, cuando Jehová mismo no los ha enviado, y ellos han esperado para que se realice una palabra. ¿No es una visión falsa la que ustedes han visto en visión, y una adivinación mentirosa lo que han dicho, al decir: ‘La expresión de Jehová es’, cuando yo mismo no he hablado nada?”

Fiel a las palabras de Dios registradas en el capítulo 13 de Ezequiel, la Watchtower en efecto, pretende ser un profeta. Tal vez no en el sentido de estar inspirado en la misma forma que los profetas bíblicos, pero indiscutiblemente afirman que son la única autoridad para interpretar la Biblia y proféticamente hablar en el nombre de Jehová. En esencia, sus proclamaciones – como se ha dicho en la profecía – son hechas como si dijeran: “La expresión de Jehová es…”

Para estar seguros, la Watchtower afirma ser el portavoz de una clase Jeremías y Ezequiel, una clase de profeta, y así sucesivamente. Así que en ese sentido Jehová se dirige con razón a ellos como los profetas de Israel, aunque como ” profetas estúpidos’’.

Es importante destacar que, al igual que Jesús predijo que la actividad de los falsos profetas precedería a la parusía y que durante la parusía habría una influencia engañosa dirigida contra los mismísimos escogidos de Dios, asimismo Pablo predijo que el hombre del desafuero operaría dentro del templo espiritual de Dios dirigiéndolo, hasta que la manifestación del Señor Jesús acabara con él. Los profetas estúpidos residen dentro del “grupo íntimo” del pueblo de Dios hasta el día de Jehová. Es decir, cuando Jehová entra en juicio con los videntes de Israel.  Los siguientes versículos dicen:

”Por lo tanto, esto es lo que ha dicho el Señor Soberano Jehová: “Por causa de que ustedes han hablado falsedad y han visto en visión una mentira, por lo tanto aquí estoy contra ustedes’, es la expresión del Señor Soberano Jehová”. Y mi mano ha llegado a estar contra los profetas que están viendo en visión falsedad y que están adivinando una mentira. En el grupo íntimo de mi pueblo no continuarán, y en el registro de la casa de Israel no serán escritos, y al suelo de Israel no vendrán; y ustedes tendrán que saber que yo soy el Señor Soberano Jehová, por causa, sí, por causa de que ellos han descarriado a mi pueblo, diciendo: “¡Hay paz!”, cuando no hay paz, y hay uno que construye un tabique, pero en vano hay quienes lo enlucen con lechada. ’’

Una vez más, fiel a la profecía, la directiva de los testigos de Jehová ha declarado que hay paz entre ellos y Dios. Y eso está directamente vinculado a 1914. ¿Cómo así?

En las décadas siguientes a 1914 la Sociedad Watchtower ha desarrollado extensas interpretaciones proféticas, todas ellas vinculadas a 1914 de una manera u otra. Probablemente el aspecto más trascendental es su afirmación predicada tantas veces que Cristo hizo una inspección invisible de la casa de Dios y nombró a la Sociedad sobre todos sus bienes en 1918. Eso significa, en efecto, que Jesús ya les ha dado su aprobación irrevocable. En relación con esto, la Watchtower afirma que desde 1919 Babilonia la Grande ha caído y que actualmente todos los testigos de Jehová residen en un paraíso espiritual; esto, a pesar de los males que privan dentro de la organización como la prevalencia de miles de pedófilos escondidos dentro de las congregaciones de los testigos de Jehová.

Muchas de las denuncias y reproches proféticos de Dios, que se dirigen a los líderes de su pueblo, han sido aplicados inteligentemente por la directiva de la organización al período de 1914-1919. Como resultado, los testigos de Jehová no tienen base bíblica para anticipar cualquier tipo de hora de la verdad o juicio proveniente de arriba. Ellos han sido llevados un por mal camino, teniendo la seguridad de que hay paz con Dios y que Jehová no tiene problema  alguno con su organización terrestre limpiada.

Pero la doctrina de la Watchtower 1914 es evidentemente falsa. Y quienes la promueven como una auténtica verdad de la Biblia y como una “expresión de Jehová” están sin duda ‘’viendo en visión falsedad y adivinando una mentira.”

Jehová después mandó a su profeta a decir: ” Di, a quienes lo enlucen con lechada, que caerá. Un aguacero inundante ciertamente ocurrirá, y ustedes, oh piedras de granizo, caerán,  y una ráfaga de tempestades de viento misma causará un partir. Y, ¡mira!, el muro tendrá que caer. ¿No se les dirá a ustedes: ‘¿Dónde está el revestimiento con el cual hicieron el enlucido?’’

Con cada año que pasa y cada década más alejada de 1914, los profetas de la Sociedad han esperado en vano  ver sus palabras hechas realidad, como lo predijo Ezequiel. Como resultado de las fallas evidentes en sus profecías,  se han visto en la necesidad de enlucir más y más capas de cal en su pared organizacional, para mantener las apariencias. Por ejemplo, desde 1995 la Sociedad Watchtower ha aplicado liberalmente varias capas de enlucido para cubrir el hecho de que la generación de 1914 murió.

Pero es en vano que los testigos de Jehová han trabajado tan duro promoviendo una falsedad. ¡El muro está condenado a caer! ¡Su irrealidad se reunirá con la verdad! Pero, ¿quién va a derribar el muro? Jehová. El muro caerá cuando comience el día de Jehová. La profecía continúa:

”Por lo tanto, esto es lo que ha dicho el Señor Soberano Jehová: ‘También ciertamente haré que estalle una ráfaga de tempestades de viento en mi furia, y en mi cólera ocurrirá un aguacero inundante, y en furia habrá piedras de granizo para un exterminio. Y ciertamente demoleré el muro que ustedes han enlucido con lechada y lo pondré en contacto con la tierra, y su fundamento tiene que quedar expuesto. Y ella ciertamente caerá, y ustedes tienen que acabarse en medio de ella; y tendrán que saber que yo soy Jehová’. ”‘Y ciertamente llevaré mi furia a su final sobre el muro y sobre los que lo enlucen con lechada, y les diré a ustedes: “El muro ya no es, y los que lo enlucieron ya no son, los profetas de Israel que están profetizando a Jerusalén y que están viendo en visión para ella una visión de paz, cuando no hay paz”, es la expresión del Señor Soberano Jehová. ’’

El aguacero inundante y las granizadas de ira de Jehová harán caer al muro encalado de la Watchtower. Esto se debe a que la tormenta va a ser una expresión auténtica de la parusía de Jesucristo, y en ese momento todo lo relacionado con 1914 llegará a ser conocido como uno de los mayores engaños jamás perpetrados sobre un pueblo confiado. La profecía de Isaías confirma que la profecía de Ezequiel aquí considerada habla de la futura parusía de Cristo. El capítulo 28 de Isaías se dirige también a los gobernantes del pueblo de Dios, que se han ocultado en una mentira. Pero la inundación de la ira de Dios barrerá su refugio de  una mentira.

En concreto, Isaías 28: 14-18 dice: ” Por lo tanto, oigan la palabra de Jehová, fanfarrones, gobernantes de este pueblo que está en Jerusalén: Porque ustedes han dicho: “Hemos celebrado un pacto con la Muerte; y con el Seol hemos efectuado una visión; la avenida repentina, inundante, en caso de que pase, no vendrá a nosotros, porque hemos hecho de una mentira nuestro refugio, y en la falsedad nos hemos ocultado”; por lo tanto, esto es lo que ha dicho el Señor Soberano Jehová: “Aquí voy a colocar como fundamento en Sión una piedra, una piedra probada, el precioso ángulo de un fundamento seguro. Nadie que ejerza fe será sobrecogido de pánico. Y ciertamente haré del derecho el cordel de medir, y de la justicia el instrumento de nivelar; y el granizo tiene que barrer el refugio de una mentira, y las aguas mismas inundarán el mismísimo escondrijo. Y el pacto de ustedes con la Muerte ciertamente será disuelto, y aquella visión de ustedes con el Seol no subsistirá. La avenida repentina, inundante, cuando pase… ustedes también tienen que llegar a ser para ella un lugar de holladura. ’’

El significado de la profecía de Isaías no solo está en armonía con Ezequiel, sino que coloca al torrente de indignación de Dios contra los jefes de su pueblo en el contexto de la llegada de Cristo –  el “fundamento seguro” – en contraposición a un muro pobremente construido, encalado. Cabe destacar también que el “pisoteo” debe coincidir con el pisoteo del santuario (la Jerusalén antitípica) por la cosa repugnante, algo que es una característica prominente de la señal de la presencia de Cristo.

La directiva de los testigos de Jehová está, sin duda, bien descrita como fanfarrona. Una y otra vez  han declarado ser fieles, discretos y grandes árboles de justicia que se elevan sobre todos los demás. Y como ya hemos comentado, las profecías se han interpretado con el fin de dar la impresión de que Jehová ha declarado que la Watchtower es justa y limpia. De esta manera, se han refugiado en una mentira y ocultado en falsedad.

Volviendo a Ezequiel, en las palabras finales del capítulo 12 Jehová dijo a su Atalaya que no habría más postergación de su palabra. Es por ello que Ezequiel dijo a los profetas estúpidos que su muro iba a caer.

Por lo tanto, en estos momentos – ya que el sistema global se tambalea hacia la catástrofe inevitable – puede afirmarse con seguridad  de que no habrá más postergación de los juicios de Jehová. La directiva de los testigos de Jehová, el Cuerpo Gobernante de la Sociedad Watchtower y todos aquellos asociados con él,  quedan advertidos por medio de este escrito que “el muro debe caer”, ¡su muro organizacional enlucido va a caer muy pronto!