Hace miles de millones de años no había nada. Sólo la oscuridad del olvido.
Entonces, en un instante de tiempo, a partir de un simple punto de materia concentrada, comenzó la Creación. Los científicos han eufemísticamente llamado ese principio el Big Bang. La teoría del Big Bang armoniza con la verdad expresada en las primeras palabras de la Biblia que dicen simplemente: “En el principio…”
Pero, ¿de dónde viene la materia súper condensada del principio? Siendo esta materia, los pedacitos atómicos y subatómicos pequeños de los cuales todo está hecho.
El genio, Albert Einstein, ideó una fórmula algebraica, el famoso E = MC2, que expresa la relación entre la masa y la energía.
El entender ese secreto desbloqueó el inmenso poder contenido en un solo átomo. Pero si la masa, o materia, puede ser convertida en energía, como en el caso de una bomba atómica, entonces lo contrario también debe ser cierto. La energía puede transformarse en materia. Los científicos han descubierto recientemente que la luz, que está compuesta de pequeños fragmentos de energía sin masa llamados fotones, puede degradarse en materia.
Así que la pregunta realmente es, ¿de dónde proviene toda la energía o la luz?
La Biblia, provee la respuesta. Refiriéndose a sí mismo como la fuente de energía ilimitada, el Creador invita a la gente a contemplar el inmenso universo mientras continúa cambiando sobre nosotros: ” Levanten los ojos a lo alto y vean. ¿Quién ha creado estas cosas? Es Aquel que saca el ejército de ellas aun por número, todas las cuales él llama aun por nombre. Debido a la abundancia de energía dinámica, porque él también es vigoroso en poder, ninguna [de ellas] falta. “.
Y así como Dios tiene un nombre para todas las innumerables estrellas, algunas de las cuales ya han muerto a medida que nacen nuevas, Dios mismo tiene un nombre personal. El mismo capítulo 40 de Isaías continúa diciendo: ” ¿No has llegado a saber, o no has oído? Jehová, el Creador de las extremidades de la tierra, es un Dios hasta tiempo indefinido. Él no se cansa ni se fatiga. No se puede escudriñar su entendimiento. ’’
En hebreo, el nombre de Dios estaba representado por cuatro consonantes correspondientes a las letras latinas de YHWH. En inglés antiguo el nombre se tradujo primero con la letra “I”. Pero alrededor de 1600 la letra “J” fue introducida al alfabeto inglés y, al igual que en español, todos los nombres hebreos que se deletrean con un “Y” se traducen con un “J.” Esto incluiría nombres comunes como José, Jacob, Josué, Jeremias, así como el nombre Jesús. Desde la invención de la letra J, la traducción inglesa del nombre dado por Dios a sí mismo ha sido aceptada como Jehová.
Pero la creación de nuestro universo local no fue la primera creación registrada. La Biblia revela que existe vida en la misma dimensión en que la Fuente de energía habita, incontables criaturas inteligentes que fueron testigos de la creación de la Tierra hace miles de millones de años.
Refiriéndose a ese acontecimiento, Dios le preguntó una vez a un hombre llamado Job, donde estaba él cuando la tierra fue creada: “cuando las estrellas de la mañana gozosamente clamaron a una, y todos los hijos de Dios empezaron a gritar en aplauso’’.
Obviamente, no había hijos terrenales de Dios que pudieran haber presenciado la creación de la tierra. Aquellos hijos de Dios que aplaudieron la obra magistral y creadora de Jehová fueron ángeles. Llegaron a existir mucho antes de que Dios creara los cielos físicos y la tierra.
Puesto que los ángeles son llamados hijos de Dios, eso significa que tuvieron un comienzo también, así como los hijos humanos nacen de un padre. Y la Biblia habla de eso en las primeras palabras del evangelio según Juan, diciendo: ” En [el] principio la Palabra era, y la Palabra estaba con Dios, y la Palabra era un dios. Este estaba en [el] principio con Dios. Todas las cosas vinieron a existir por medio de él, y sin él ni siquiera una cosa vino a existir.”
Aunque esta declaración es ampliamente malentendida por los supuestos cristianos, el libro de Apocalipsis arroja algo de luz sobre ese texto en su capítulo 3, versículo 14 revelando que la Palabra, o Jesús, es “el principio de la creación por Dios”.
Ambas escrituras que citan “el principio” se refieren al comienzo de la creación en la dimensión espiritual, la cual precede al comienzo del universo físico y revela que la entidad que descendió del cielo en la persona de Jesús fue la primera de creación de Dios. Por eso el apóstol Pablo dijo de Jesús: “Es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda la creación”.
Pablo continuó revelando que el primogénito de toda la creación fue entonces empoderado por Dios para crear todo lo demás. Es por eso que Jesús se refirió a sí mismo como el hijo unigénito de Dios, porque todos los otros hijos, o ángeles, llegaron a tener vida por medio del primogénito.
Siendo la imagen de Dios, el Primogénito es en sí mismo un dios, lo cual es exactamente lo que se dice en el capítulo uno de Juan, versículo 18, el cual afirma que Jesús es el dios unigénito que está al lado del Padre.
Entre los hijos celestiales de Dios que la Palabra produjo para el Padre había querubines y serafines, que son órdenes especiales de ángeles. En el libro de los salmos Dios comparó a los ángeles con llamas de fuego, indicando que son una forma de energía, no de materia, no del polvo. En armonía con eso, la palabra hebrea serafín literalmente significa “quemar”.
Un querubín recibió una misión muy especial de Dios. Él debía servir como supervisor benevolente de los dos primeros humanos creados por Dios. En el libro de Ezequiel se le llama el querubín perfecto que cubría en el Edén. Trágicamente, sin embargo, ese querubín de confianza comenzó a envidiar a Dios. Él fabricó un esquema para exaltarse como dios sobre la familia humana que apenas comenzaba.
En el principio, Adán sólo tenía una regla a seguir, no comer ni tocar un árbol especial. Probablemente porque Adán tenía mayor experiencia que su recién formada esposa, el querubín invisible apuntó a Eva, fingiendo ser una serpiente que hablaba. Es más que probable que el astuto ángel maniobró a la serpiente para que anduviera en el árbol del conocimiento y de esta manera mostrar que supuestamente había comido algo del fruto prohibido, para dar a Eva la impresión de que el fruto daba poder al reptil para hablar, dando así credibilidad a la idea de la serpiente de que sus ojos serían abiertos y que ella llegaría a ser como Dios si comía de él.
Habiendo tenido éxito en su esquema engañoso, el querubín del Edén ha sido conocido desde entonces como Satanás el Diablo. Y como resultado de su actuar egoísta, Adán y Eva trajeron la muerte sobre sí mismos y sobre todos sus descendientes. Es por eso que Jesús dijo de Satanás: ” Ese era homicida cuando principió, y no permaneció firme en la verdad, porque la verdad no está en él. Cuando habla la mentira, habla según su propia disposición, porque es mentiroso y el padre de [la mentira]. “
Así como las pruebas de la existencia de Dios son claramente evidentes al contemplar la creación, como dijo Pablo, la influencia mundial de un mentiroso sobrehumano y asesino también está muy en evidencia. Cuán verdaderas son las palabras del apóstol Juan: ‘’el mundo entero yace en el poder del inicuo. ’’
Pero no debemos suponer que el sistema actual continuará indefinidamente. Cristo ya ha vencido a Satanás, habiéndose convertido en humano por medio de un milagro, lo cual implicó haber nacido como tal. Como hombre, Jesús demostró completa obediencia y lealtad a Dios, algo que el primer hombre no hizo. Habiéndose sometido a la muerte más cruel imaginable en obediencia a la voluntad de su Padre, Jesús pagó la deuda de la humanidad con Dios y también demostró que el Diablo es un mentiroso al afirmar insolentemente que todas las criaturas de Dios son intrínsecamente egoístas. Habiendo resucitado de los muertos a una vida indestructible y habiendo asegurado ya el derecho de gobernar el mundo a través del pacto de Dios con él cuando era hombre, la segunda venida de Cristo será con poder y gran gloria.
Lo que queda es un período de transición tumultuosa que comenzará cuando el Diablo y sus demonios sean arrojados del cielo por el Mesías entronizado, conocido también por su nombre original de Miguel, el Arcángel.
Revelación lo explica de esta manera: ” Y estalló guerra en el cielo: Miguel y sus ángeles combatieron con el dragón, y el dragón y sus ángeles combatieron, pero este no prevaleció, ni se halló ya lugar para ellos en el cielo. De modo que hacia abajo fue arrojado el gran dragón, la serpiente original, el que es llamado Diablo y Satanás, que está extraviando a toda la tierra habitada; fue arrojado abajo a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados abajo con él. Y oí una voz fuerte en el cielo decir: “¡Ahora han acontecido la salvación y el poder y el reino de nuestro Dios y la autoridad de su Cristo, porque ha sido arrojado hacia abajo el acusador de nuestros hermanos, que los acusa día y noche delante de nuestro Dios! Y ellos lo vencieron debido a la sangre del Cordero y debido a la palabra del testimonio que dieron, y no amaron sus almas ni siquiera al arrostrar la muerte. A causa de esto, ¡alégrense, cielos, y los que residen en ellos! ¡Ay de la tierra y del mar!, porque el Diablo ha descendido a ustedes, teniendo gran cólera, sabiendo que tiene un corto espacio de tiempo.”
¿Cuánto dura el “corto espacio de tiempo”, el período de transición entre el reinado de mortal de Satanás y el comienzo del nuevo mundo que heredarán los mansos? La Biblia revela que serán aproximadamente tres años y medio.
¿Cuándo comenzará ese evento de transición? Jesús dijo que nadie sabe el día o la hora de la venida del Hijo del hombre como ladrón en la noche. Sin embargo, el apóstol Pablo predijo que cuando los hombres estén diciendo “paz y seguridad”, entonces destrucción repentina vendrá inmediatamente sobre ellos como el dolor de angustia a la mujer encinta.
¿Qué forma tomará esa destrucción repentina? Jesús dijo que nación se levantará contra nación y reino contra reino. Y ese será el comienzo de los dolores angustiosos de parto.
Mientras que los testigos de Jehová han sido instrumentales en la declaración del Reino de Cristo y el nombre de Jehová en todo el mundo, publicando Biblias y material de enseñanza en más de 700 idiomas, el corto período de tiempo después de los demonios son confinados a la vecindad de la tierra estará marcado por la persecución mundial de aquellos que tienen el trabajo de dar testimonio de Jesús, dando como resultado un testimonio final dado por los elegidos antes de su partida.
Jesús mismo advirtió: ” Pero antes de todas estas cosas les echarán mano a ustedes y los perseguirán, entregándolos a las sinagogas y prisiones, y serán llevados ante reyes y gobernadores por causa de mi nombre. Resultará para ustedes en testimonio. Por lo tanto, resuélvanlo en sus corazones que no ensayarán de antemano cómo hacer su defensa, porque yo les daré boca y sabiduría, que todos sus opositores juntos no podrán resistir ni disputar. Además, serán entregados hasta por padres y hermanos y parientes y amigos, y a algunos de ustedes los harán morir; y serán objeto de odio de parte de toda la gente por causa de mi nombre. Y, con todo, no perecerá ni un cabello de su cabeza. Mediante el aguante de parte de ustedes adquirirán sus almas.”
¿Cómo es posible ser condenado a muerte y sin embargo adquirir el alma por medio del aguante? En cuanto a los elegidos vivos entonces, su muerte resultará en su resurrección instantánea, serán devueltos a la vida en un abrir y cerrar de ojos. Por medio de la primera resurrección, Jehová reunirá a todos los elegidos en el Reino celestial durante la fase final, donde entonces serán facultados para aplastar a Satanás y a su mundo.