Los profetas insensatos esperan que sus palabras se cumplan

Boletín del Reino #22

Hay un dicho entre los testigos de Jehová que dice que las profecías bíblicas no pueden entenderse completamente hasta que se hayan cumplido. Esa es una declaración verdadera y se demostró hace mucho tiempo. Por ejemplo, en el caso de los apóstoles, solo pudieron entender las muchas profecías que se cumplieron en el curso de la vida de Jesús después de que Cristo resucitó y les abrió sus mentes.

En efecto, a los apóstoles les era imposible anticipar el cumplimiento de la palabra profética de Dios por la sencilla razón de que se encontraban en un estado de ignorancia e incredulidad. Por esa razón, después de haber resucitado, Jesús se les apareció varias veces, y en una ocasión reprendió duramente a un número representativo de sus seguidores, diciéndoles: “¡Qué insensatos son y qué lentos para creer todas las cosas que dijeron los profetas!” (Lucas 24:25).

Los líderes de los testigos de Jehová se encuentran actualmente en una situación similar, solo que peor. No es que la autoproclamada clase centinela sea lenta para creer las cosas que hablaron los antiguos profetas, no, el Cuerpo Gobernante y sus ayudantes están muy familiarizados con las profecías bíblicas y han publicado montones de comentarios al respecto. En lugar de ser lentos para creer, se han apresurado demasiado en asumir que las cosas escritas ya se han cumplido.

Trágicamente, los testigos de Jehová han sido engañados al creer que una gran variedad de profecías relacionadas con la segunda venida de Cristo y el tiempo del fin ya se han cumplido cuando ese no es el caso en lo absoluto. Hemos ignorado la advertencia apostólica de no perder el buen juicio con respecto a algún mensaje que afirme que el día de Jehová ya está aquí. Y eso también es parte del cumplimiento de las profecías.

La arrogancia de los hermanos se muestra en el video de la asamblea regional de 2022. A pesar de los impresionantes efectos especiales de la imagen metálica golpeada por la piedra del Reino, la conclusión implícita de la presentación es que todo se ha cumplido con la excepción de la destrucción de los pies de hierro y barro.

Aunque los testigos de Jehová puedan estar familiarizados casualmente con las otras profecías de Daniel sobre el tiempo del fin, no se les da una importancia particular a ninguna de ellas, ya que la Watchtower ha declarado con autoridad que se cumplieron hace mucho tiempo. Esto lo vemos con las profecías del capítulo 7, por ejemplo.

La visión nocturna de Daniel nos muestra a una bestia aterradora y feroz con dientes de hierro y garras de cobre aplastando y devorando la tierra. Esta tenía diez cuernos. Pero luego le sale un cuerno pequeño que arranca tres de los diez que ya tenía y se hace más grande que los otros siete cuernos que quedaron. Al cuerno le salen ojos y una boca que dice grandes blasfemias. Bajo el gobierno de este cuerno, la bestia finalmente conquista a los santos y prevalece sobre ellos hasta que Jehová interviene y le da el Reino a alguien como un hijo del hombre.

Los profetas de Betel afirman que los tres cuernos comenzaron a ser arrancados por primera vez en 1588. Fue entonces cuando la Armada española fue destrozada por feroces vendavales del Atlántico norte que condujeron a una victoria naval británica por defecto. Pero eso fue solo el comienzo del proceso de humillación de los tres cuernos. En el transcurso de más de dos siglos, los otros cuernos, identificados como Francia y los Países Bajos, fueron arrancados gradualmente, de modo que, con la victoria naval de Lord Nelson en Trafalgar en 1805, que también incluyó a la Armada española, se cree que el cuerno pequeño finalmente surgió como el Imperio británico y los tres cuernos rivales fueron arrancados. Hay un problema evidente con esta interpretación de la Watchtower, en realidad, varios.

En primer lugar, incluso si el Imperio Británico hubiera sido o fuera el cuerno pequeño, la alianza angloamericana no llegó a existir hasta que se formó la llamada “relación especial” después de la Segunda Guerra Mundial. Ese es un detalle importante, dado que la Watchtower afirma que el cuerno pequeño no es solo la potencia mundial británica sino el Imperio angloamericano en sí.

Sin embargo, con mucho, la contradicción más notoria es el hecho indiscutible de que las tres naciones que la Watchtower afirma que fueron desarraigadas todavía existen. Francia es igual a Gran Bretaña. Ambas son potencias nucleares, y como aliados vencedores de la última guerra mundial, ambas naciones son miembros permanentes del prestigioso Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.

Sin duda, el cumplimiento de la palabra profética de Dios involucra más que meras trivialidades históricas irrelevantes. ¿Por qué debería Dios siquiera molestarse en predecir que tres cuernos serían arrancados si el cumplimiento de esa profecía se daría en batallas navales ―en su mayoría olvidadas― de los imperios coloniales de siglos pasados y que las naciones simbolizadas por los cuernos seguirían siendo potencias mundiales viables después de eso? ¿Cuál es el punto?

Con respecto a la presentación en video de los pies de la imagen de Nabucodonosor siendo golpeados por la piedra no cortada por manos humanas, ¿no es cierto que los líderes de la Watchtower han cumplido las profecías en el sentido de que “esperan que sus palabras se cumplan”?

Estamos seguros de que la palabra de Dios no está mal. La visión de la imagen y la piedra requiere muy poca interpretación. El Reino de Dios destruirá a todos los reinos terrenales. De eso no tenemos ninguna duda. Los profetas de Betel han esperado que se cumplan sus palabras proyectando que el sistema terminará sin que ellos rindan cuentas y se vean obligados a reconocer los múltiples errores que han proclamado como la verdad de Dios. Están esperando que Armagedón los rescate. Indudablemente, esa ha sido una espera larga e irregular que ha requerido muchos ajustes.

En cuanto al capítulo 7 de Daniel, dado que la interpretación de la Watchtower es demostrablemente falsa y dado que el Cuerpo Gobernante ha permitido que persista una flagrante falsedad durante tanto tiempo, y lo peor de todo, debido a que la Watchtower habla o profetiza en el nombre de Jehová, afirmando ser el único canal de comunicación a través del cual Jehová habla hoy —no soy un falso acusador ni un mero criticón para atribuirles las palabras poco halagüeñas contenidas en las profecías—, Jehová los denomina “profetas insensatos” o “estúpidos”.

Fieles a la palabra de Dios, los profetas de Betel han proclamado que han percibido el cumplimiento de las visiones contenidas en la Biblia y que Jehová ha revelado sus asuntos confidenciales exclusivamente al Cuerpo Gobernante. Pero toda la exégesis profética de la Watchtower se describe mejor como una visión falsa, una mentira.

“Esto es lo que dice el Señor Soberano Jehová: ‘¡Ay de los profetas insensatos, que siguen sus propias ideas sin haber visto nada! Oh, Israel, tus profetas se han vuelto como zorros entre las ruinas. Ustedes no irán a las brechas de las murallas de piedra a fin de reconstruirlas para la casa de Israel, de modo que Israel se mantenga en pie en la batalla en el día de Jehová. Han tenido visiones falsas y han predicho mentiras; andan diciendo “Estas son las palabras de Jehová”, a pesar de que Jehová mismo no los ha enviado, y todavía esperan que sus palabras se cumplan. ¿Acaso no es una visión falsa lo que ustedes han tenido y una mentira lo que ustedes han predicho diciendo “Estas son las palabras de Jehová”, a pesar de que yo no he dicho nada?’” (Ezequiel 13:3-7).

Por supuesto, lo que se narra en el capítulo 7 de Daniel no es un hecho aislado de las profecías. El ascenso del cuerno pequeño es simplemente una faceta de las profecías bíblicas relacionadas con la venida de Cristo. Y como seguramente saben todos los testigos de Jehová, la Watchtower ha atribuido de una forma u otra el cumplimiento de casi todas las profecías a 1914. ¡Indubitadamente, esa es una visión falsa!

En estos momentos, nos encontramos contemplando la fase inicial del colapso de la civilización occidental. Tan pronto como la emergencia pandémica comenzó a desvanecerse, la maquinaria de guerra de la OTAN indujo a Vladimir Putin a invadir Ucrania. Una emergencia fue reemplazada por otra. Digo “indujo” porque el jefe de la OTAN admitió abiertamente haber armado y entrenado a ucranianos durante años antes del estallido de la guerra abierta. Incluso antes de la invasión, se había elaborado un paquete de sanciones de amplio alcance listo para ser impuesto. La intención declarada de librar una guerra financiera total es poner a Rusia de rodillas con su derrota. Sin embargo, en cambio, Rusia se ha beneficiado inmensamente del fuerte aumento en el precio de los productos básicos que vende.

¿Es posible que los globalistas sean tan estúpidos o la invasión rusa es simplemente una tapadera para otra cosa? Parece ser parte de un plan mayor dado que las sanciones solo han acelerado la cooperación económica y militar de Rusia y China y docenas de otras naciones ansiosas por liberarse de la dominación anglosajona. Rusia y China y los llamados BRICS están a punto de lanzar un sistema financiero completamente nuevo que excluye al dólar. El proceso de desdolarización, ahora en marcha, no es un avance insignificante.

Mientras tanto, Europa y América se están desmoronando, enterradas bajo una montaña impagable de deuda denominada en dólares, la moneda de reserva reinante en el mundo. Y mientras el dólar se fortalece en este momento en relación con otras monedas, el mismo está a punto de colapsar. Los banqueros centrales ya han señalado su intención de subir las tasas de interés hasta que algo se quiebre. El “Gran Reinicio” probablemente se llevará a cabo mediante la implementación de una criptomoneda oficial después del colapso de Europa y América. Tal sistema permitiría a los emisores determinar qué se puede comprar y vender y quién puede comprar y/o vender.

Obviamente, en algún momento en un futuro no muy lejano, los testigos de Jehová se enfrentarán a la realidad de que las personas no comenzaron a recibir la marca 666 de la bestia en 1922, como se afirma absurdamente en el libro Apocalipsis de la Watchtower. 

No se debe suponer que el oscuro invierno que ahora se avecina es culpa de Vladimir Putin. Mucho antes de que los ejércitos rusos irrumpieran en el este de Ucrania, el príncipe Carlos acordó con los más de 100 bancos principales del sistema financiero transatlántico negar créditos a las industrias que emiten gases de efecto invernadero. Eso significa que la escasez de gas, petróleo y fertilizantes y la interrupción de toda la frágil cadena de suministro de la que depende la civilización no son consecuencias no deseadas de una pandemia ni el resultado directo de una operación militar localizada en Europa del Este. Más bien, el lento desastre que envuelve a Europa y Estados Unidos es el resultado de la puesta en marcha de una conspiración bien coordinada por parte de las personas más ricas e influyentes del mundo occidental para hacer colapsar el sistema global e imponer un gobierno mundial desprovisto del desorden de la democracia y las naciones soberanas e independientes. En última instancia, los globalistas tienen la intención de reducir la población mundial en un porcentaje muy grande.

¿Podría ser que estamos presenciando el surgimiento del cuerno pequeño y que los tres cuernos que están destinados a caer ante él son el núcleo de la alianza angloamericana, incluyendo a Francia? Creo que eso es precisamente lo que está sucediendo.

Sin embargo, si ese es el caso, si el dúo británico-estadounidense de larga data cumplirá la profecía cuando sean desarraigados como naciones soberanas, ¿cómo se podría cumplir entonces la visión de la imagen de los pies de hierro y barro?

Ese dilema se resuelve si reconocemos que la imagen misma representa al octavo rey. Y según Apocalipsis, el octavo rey proviene de los siete. En armonía con esa revelación, la imagen descansa sobre los pies de hierro y barro. Dado que la Watchtower también ha afirmado inexplicablemente que la cabeza de la bestia salvaje fue herida de muerte durante la Primera Guerra Mundial, a pesar de que según todos los informes Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia salieron victoriosos, podemos esperar que el actual Imperio angloamericano sufra una catástrofe mortal en el futuro cercano, solo para emerger del abismo como el cordero de dos cuernos que habla como dragón y da vida a la imagen de la bestia para que hable. ¿No crece el cuerno pequeño para volverse dominante y pronunciar grandes blasfemias contra Dios?

Parece que la asamblea de la Watchtower de 2022, debido a su tema, ha cumplido una profecía. Cierto, es deseable que los cristianos busquen la paz con sus hermanos en la fe y con todos los hombres, pero dado que el juicio de la casa de Dios no se ha llevado a cabo ―solo en la visión mentirosa de la Watchtower― es impropio dar a entender que todo está bien entre los cristianos y Cristo. ¿Nunca han leído las siete cartas que Jesús envió a las congregaciones que existirían cuando él llegue como ladrón en la noche? ¿O pasan por alto las implicaciones de la admonición repetida de Jesús: “El que tenga oídos, que oiga lo que el espíritu les dice a las congregaciones”?

De hecho, hay razones para creer que la asamblea regional de 2022 “Tengan paciencia” fue simplemente parte de un plan en curso para estucar más la pared que ha intentado mantener en pie la organización. “Todo eso pasará porque ellos han descarriado a mi pueblo diciendo ‘¡Hay paz!’, cuando no hay paz. Cuando alguien construye una pared frágil, ellos la recubren con cal” (Ezequiel 13:10).

Así que, mientras que los profetas de Betel han esperado que sus falsas visiones se hagan realidad, las verdaderas visiones de Dios se están materializando ante nuestros propios ojos. Cuando el sistema colapse, también lo hará la pared encalada de la Watchtower. Entonces espero que se me encomiende la tarea de presentarles el mensaje de Dios: “A esos que recubren la pared con cal, diles que se va a caer. Vendrá una lluvia torrencial y caerá granizo, y fuertes vientos de tormenta la derribarán. Y, cuando la pared se caiga, les preguntarán: ‘¿Dónde está la capa de cal?’” (Ezequiel 13:11, 12).

Este mensaje se ha enviado a las sucursales de la Watchtower de todo el mundo.