¿Cómo terminará el último acto? Esta fue la pregunta que nos hizo La Atalaya del 1de Febrero y también fue el tema que tratamos la semana pasada. La edición del 1de Marzo de la revista La Atalaya también publicó dos artículos de estudio; uno sobre el Esclavo Fiel y el otro sobre el regreso de Cristo. Tal y como el artículo del mes de Febrero, este también es un simple reciclaje de las interpretaciones de la Sociedad Watchtower que tienen como fundamento la doctrina que Cristo volvió en el año 1914 y que el juicio sobre la casa de Dios empezó en 1918.
Obviamente este tema ya ha sido tratado en numerosos comentarios y preguntas, sin embargo, muchos lectores han pedido que e-watchman.com haga un comentario respecto a la información que viene en la caja de la página 16 de la edición del 1de Marzo de La Atalaya; especialmente en lo que concierne a la idea que Revelación 7:3 prueba que el sellamiento de los hijos de Dios sucede antes del inicio de la tribulación. Por lo tanto, a riesgo de redundar más acerca de este tema reconsideremos de nuevo esta pregunta a la luz de los más recientes comentarios de la Sociedad Watchtower.
La caja suplementaria de la página 16 de la edición del 16 de Marzo de la revista La Atalaya nos pregunta:
En los capítulos 24 y 25 de Mateo se dice que Jesús “viene” en distintos sentidos. Él no necesita desplazarse físicamente para ‘venir’, sino que “viene” en el sentido de que dirige su atención a la humanidad o a sus seguidores, con frecuencia en calidad de Juez. Así, en 1914 ‘vino’ para empezar su presencia como Rey entronizado (Mateo 16:28;17:1; Hechos 1:11). En 1918 ‘vino’ como mensajero del pacto y juzgó en primer lugar a los que afirmaban servir a Jehová (Malaquías 3:1-3; 1 Pedro 4:17). Y en Armagedón ‘vendrá’ a ejecutar la sentencia contra los enemigos de Dios (Revelación 19:11-16).
La venida (o llegada) a la que se alude varias veces en Mateo 24:29-44 y 25:31-46 tendrá lugar en “la gran tribulación” (Revelación 7:14). Por otra parte, la venida que se menciona repetidamente en Mateo 24:45 a 25:30 tiene que ver con la acción de juzgar, a partir de 1918, a los que afirman ser sus discípulos. No sería razonable decir, por ejemplo, que las acciones de recompensar al esclavo fiel y de castigar a las vírgenes necias y al esclavo indolente, que escondió el talento del Amo, tendrán lugar cuando Jesús ‘venga’ en la gran tribulación. Eso significaría que a muchos de los ungidos se les hallaría infieles en ese momento y, por tanto, tendrían que ser reemplazados. Sin embargo, Revelación 7:3 indica que para entonces todos los esclavos ungidos de Cristo ya habrán sido “sellado[s]” de manera permanente.
Ahora bien, la pregunta es: ¿Indica Revelación 7:3 que el resto de los unguidos son sellados de manera permanente antes del inicio de la Gran Tribulación?
La respuesta es no. La secuencia en que se dan los acontecimientos dicen lo contrario; especialmente el hecho que el sellamiento final ocurredurante la Gran Tribulación pero antes de Armagedón, ¿Cómo es eso?
La apertura del sexto sello es lo que conduce a los días más tétricos en la historia de la humanidad; es decir, la Gran Tribulación. Revelación 6:12-17 lee: “Y vi cuando abrió el sexto rollo, y ocurrió un gran terremoto; y el sol se puso negro como saco de pelo, y la luna entera se puso como sangre, y las estrellas del cielo cayeron a la tierra como una higuera sacudida como cuando un viento fuerte echa sus higos aún no maduros. Y el cielo se apartó como un rollo que se va enrollando, y toda montaña, y toda isla fueron removidas de sus lugares. Y los reyes de la tierra y los de primer rango y los comandantes militares y los ricos y los fuertes y todo esclavo y toda persona libre se escondieron en las cuevas y en las masas rocosas de las montañas. Y siguen diciendo a las montañas y a las masas rocosas: caigan sobre nosotros, y escóndanos del rostro del que está sentado en el trono y de la ira del Cordero, porque ha llegado el día de la gran ira de ellos, y ¿Quién puede estar de pie?”
Según las palabras de Jesús, el colapso de los simbólicos cielos es el resultado de la Gran Tribulación. Es por eso por lo que en Mateo 24:9 leemos: “Inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol será oscurecido, y la luna no dará su luz, y las estrellas caerán del cielo, y los poderes de los cielos serán sacudidos, y entonces aparecerá en el cielo la señal del Hijo del Hombre.”
Por lo tanto, podemos decir que la apertura del sexto sello ocurre durante la Gran Tribulación. Es muy posible pensar que la apertura del segundo rollo que desata al caballo de la guerra, haciendo que se levante nación contra nación es el comienzo de la verdadera tribulación; es lo que resulta en un “Gran Terremoto” que lleva al total colapso del presente sistema de cosas. Sin duda alguna, el que el sol sea oscurecido y la luna se convierta en sangre, y el que las montañas y las islas sean removidas es un lenguaje simbólico que nos dice cómo el presente sistema de cosas será sacudido desde abajo hasta arriba.
Los siguientes versículos de Revelación comenzando en el capítulo 7 describen el sellamiento final y la recolección de la Gran Muchedumbre, diciendo: “Después de esto vi a cuatro ángeles de pie sobre los cuatro ángulos de la tierra, reteniendo los cuatro vientos de la tierra, para que no soplara viento alguno sobre la tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol. Y vi a otro ángel que ascendía del nacimiento del sol, teniendo un sello del Dios vivo; y clamó con voz fuerte a los cuatro ángeles a quien estaba concedido hacer daño a la tierra y al mar, y dijo: No hagan daño a la tierra, ni al mar, ni a los arboles, hasta después que hayamos sellado en la frente a los esclavos de nuestro Dios.”
Note por favor que Revelación 7:1 empieza con la frase “Después de esto”. ¿Exactamente, después de qué? Es propio pensar que después de la fase inicial de la Gran Tribulación que sacude los cielos y la tierra.
El error de la Sociedad Watchtower consiste en creer que los ángeles están deteniendo los cuatro vientos de la Gran Tribulación. Ese no puede ser el caso debido a que la secuencia con que se dan los acontecimientos en los capítulos 6 y 7 de Revelación nos dicen que el sellamiento ocurre después que la Gran Tribulación ha comenzado. Los vientos que los cuatros ángeles están deteniendo aparentemente simbolizan los vientos destructivos que Dios desatará en Armagedón; la fase final de la Gran Tribulación.
El hecho que el sellamiento ocurre durante la Gran Tribulación y no antes se hace aparente cuando leemos las palabras de Jesús que nos dicen: “Pero a menos que se acortara la Gran Tribulacion en esos días, ninguna carne sería salva, mas por causa de los elegidos, esos días serán acortados.”
Pero, ¿Por qué la Gran Tribulación es acortada a causa de los elegidos? Según la declaración del ángel al momento de abrir el quinto sello aún existe un número específico de elegidos; remanentes del Cuerpo de Cristo a los que se les dará muerte antes de Armagedón. Revelación 6:11 nos dice que la venganza de Dios es contenida “Hasta que se completara también el número de sus coesclavos y de sus hermanos que estaban a punto de ser muertos, como ellos también lo habían sido.”
Por lo tanto, la Gran Tribulación es acortada para que ocurra el sellamiento final en preparación para la revelación de los hijos de Dios, y para ser liberados por medio del rescate. La Sociedad Watchtower se equivoca al decir que el sellamiento ocurre antes de la Gran Tribulación. Ellos también se equivocan al creer que Dios no puede reemplazar Cristianos unguidos que resulten infieles durante la fase inicial de la Gran Tribulación; antes del sellamiento final.
Considere con más detalle las cartas de Jesús a las siete congregaciones del libro de Revelación.
Las siete congregaciones representan a la entera congregación unguida Cristiana durante el Día del Señor. Con esto en mente, considere el consejo de Jesús a la congregación de Tiatira en Revelación 2:20-23, el cual lee así: “No obstante sí tengo esto contra ti: que toleras a aquella mujer; Jezabel, que a sí misma se llama profetisa, y enseña y extravía a mis esclavos para que cometan fornicación y coman cosas sacrificadas a los ídolos. Y le di tiempo para que se arrepintiera, pero ella no quiere arrepentirse de su fornicación. ¡Mira! Estoy a punto de echarla a un lecho de enfermo, y a los que cometen adulterio con ella, en Gran Tribulación, a menos que se arrepienta de los hechos de ella. Y a los hijos de ella los mataré con plaga mortífera, de modo que todas las congregaciones sabrán que yo soy el que escudriña los riñones y corazones, y a ustedes les daré individualmente según sus hechos.”
La Sociedad Watchtower aplica este consejo profético a la inmoralidad sexual literal de algunas mujeres dominantes de la congregación. El libro “Apocalipsis”, publicado por la Sociedad Watchtower, dice que estos individuos semejantes a Jezabel son expulsados de la congregación. Sin embargo, esto no es lo que dice Jesús.
Según el libro de Revelación, Jesucristo permite que la inmoral Jezabel continúe dominando a su pueblo hasta el tiempo en que Él personalmente la juzga y la echa en el horno de la Gran Tribulación y mata a sus hijos ilegítimos. Esto nos sugiere claramente que esta “Jezabel” no es juzgada ni tratada por algún comite judicial humano sino solamente por Jesús durante la Gran Tibulación.
Pero esto no es todo. También se nos dice que Jesús exhorta a esta simbólica Jezabel al arrepentimiento. Puesto que ella se encuentra dentro de la congregación unguida, esto significa que existen Cristianos unguidos que le son infieles a su Dueño Marital.
Por lo tanto, si esta simbólica Jezabel ejerce influencia demoníaca sobre los esclavos de Cristo dentro de la congregación, por lógica podemos pensar que esta “Jezabel” representa a una clase de Cristiano apóstata que reside dentro de la la casa de Dios hasta el Día del Juicio. También notamos que ella no es juzgada sino hasta el tiempo de la Gran Tribulacion; tal y como lo indica el libro de Revelación; por lo tanto, es obvio que ella no fue marcada con el sello de aprobación de Jehová para ser condenada después. Recuerde, el sello final significa que Dios les da su aprobación irrevocable.
En los tiempos del profeta Elías Jezabel indujo a los Israelitas a la adoración de Baal. Como adoradora de Baal es posible que la reina Jezabel haya sido una mujer inmoral y adúltera; sin embargo, la Biblia da evidencia de su fornicación espiritual. Cuando se le preguntó al rey Jehú; rey recientemente nombrado por Jehová, si había paz entre ellos, Jehú respondió al hijo de Jezabel: ¿Qué paz podría haber mientras existan las fornicaciones de tu madre y sus numerosas hechicerías?
Es bueno reflexionar que tal vez esta cita nos indique que la “Jezabel” que encontramos en el libro de Revelación no es precisamente una mujer fornicaria literal.
Revelación tambien señala que la simbólica Jezabel extravía a los esclavos de Cristo y los induce a la idolatría y al adulterio espiritual. Ella también es una profetisa falsa. Por lo tanto, ¿Qué o a quiénes podría representar la “Jezabel” del libro de Revelación? La Jezabel de la profecía de Jesús representa a una facción apóstata y corrupta de individuos unguidos dentro de la actual Organización Watchtower, que al igual que Jezabel, inducen a la moderna nación Israelita espiritual a la idolatría y al adulterio espiritual con un ídolo semejante a Baal; un ídolo al que conocemos como Las Naciones Unidas. (Veáse el comentario “Denunciando la Prostitución de la Sociedad Watchtower”)
No es por lo tanto de admirarnos que el consejo que Jesus da a las siete congregaciones incluyera la advertencia formal: “El que tenga oido, oiga lo que el espíritu dice a las congregaciones.”
Cuando exploramos las intricadas conecciones de la profecía bíblica hayamos muchas cosas interesantes. Por ejemplo: El capítulo11 del libro de Revelación nos recuerda la experiencia del profeta Elías cuando Revelación nos dice que los dos testigos unguidos “Tienen autoridad para cerrar el cielo de modo que no caiga lluvia durante los días de su profetizar, y tienen autoridad sobre las aguas para tornarlas en sangre, y para herir la tierra con toda clase de plaga cuantas veces deseen”. Aquellos que conocen la Biblia sin duda alguna recuerdan que durante los días de Jezabel Elías dio la orden y ocurrió una sequía de tres años y medio. -El mismo tiempo que los dos testigos profetizan vestidos de saco-. No solo eso, también durante el tiempo en que Elías anduvo huyendo y ocultándose de la perversa reina Jezabel Jehová recordó a su profeta que Él aún tenía 7000 profetas que no se habían hincado ante Baal o besado su grotesca imagen.
El apóstol y profeta Pablo hace referencia al remanente de los días de Elías; es decir, a los 7000 profetas, y lo aplica a la congregación Cristiana cuando dice en Romanos 11:4-5: “Sin embargo, ¿Qué le dice la declaración formal divina? He dejado que me queden siete mil hombres, hombres que no han doblado la rodilla ante Baal. De esta manera, por lo tanto, también en la época presente ha llegado a haber un resto según una selección que se debe a bondad inmerecida.”
Aunque Pablo se refiere al Primer Siglo como la época presente cuando aparece el resto de los 7000, no debemos ignorar el hecho que el capítulo 11 del libro de Revelación nos habla de un número indeterminado de gente que permanece fiel a Jehová; es decir, “El remanente”, los cuales permanecen en la tierra después que se establece el reino de Dios y comienza la resurrección de los santos. Por lo tanto, la “época presente” de la que nos habla Pablo es, en realidad, el profético Día del Señor.
Es aquí donde las cosas se tornan interesantes:
El capítulo 11 de Revelación tambien hace referencia a 7000 hombres que son muertos durante “Un Gran Terremoto”. Revelación 11:13 lee:“Y en aquella hora ocurrió un gran terremoto, y la décima parte de la ciudad cayó; y siete mil personas fueron muertas por el terremoto, y los demás se atemorizaron y dieron gloria al Dios del cielo.”
La décima parte de la ciudad que cae es la representación terrenal de la congregacion de Cristo que ha sido sellada y que permanece en la tierra aún después de haber entrado en funciones el reino de Dios; es decir, lo que conocemos como la Organización Visible de Jehová. (El número 10 significa totalidad; algo que es completo en sentido terrenal. Por lo tanto, podemos decir que la décima parte de la ciudad simboliza al entero Cuerpo de Cristo que en aquel momento aún permanece en la tierra .)
Isaías 6:11-13 también predice una caída y también predice desolación y se refiere a la décima parte de Israel como la semilla santa. El profeta escribió: “Ante esto, dije:¿Hasta cuándo oh Jehová? Entonces Él dijo: Hasta que las ciudades caigan estrepitosamente para estar sin habitante, y las casas estén sin hombre terrestre, y el suelo mismo sea arruinado hasta ser una desolación; y Jehová realmente aleje a los hombres terrrestres, y la condición desértica de veras llegue a ser muy extensa en medio de la tierra. Y todavía habrá en ella un décimo, y de nuevo tiene que llegar a ser algo como quemazón, como un árbol grande y como un árbol macizo en los cuales cuando hay tala de ellos, hay tocón, una descendencia santa será el tocon de él.”
Debido al contexto de la profecía en que aparecen estos testigos unguidos semejantes a Elías, los 7000 hombres que son muertos representan; sin duda alguna, el número final de los sellados que no se hincan ante la imagen de la Bestia Salvaje o que permiten que sean marcados por ella durante la hora de prueba.
No deberíamos pensar que estos siete mil hombres son muertos solamente de manera simbólica; tal y como nos dice la Sociedad Watchtower cuando afirma que estos fueron muertos en 1919. Esto es evidente por el hecho que Jehová “Causa la ruina de los que están arruinando la tierra” inmediatamente después que estos 7000 hombres son muertos. Esto sucede, sin duda alguna, como respuesta a estos asesinatos.
Pero volviendo al tema de Jezabel. El hecho que “Jezabel” permanece en medio de la congregación de Cristo hasta el tiempo en que Él personalmente la ejecuta significa que la Jezabel espiritual perseguirá y buscará dar muerte a los siervos verdaderos de Jehová; tal y como lo hizo Jezabel con Elías.
Por lo tanto, podemos esperar en el futuro que los verdaderos hijos del reino; es decir, estos 7000 hombres de los que nos habla el libro de Revelación, serán perseguidos y traicionados por la facción representante de Jezabel durante un tiempo que Jesús profetizó, cuando dijo:“Entonces los entregarán a tribulación y los matarán , y serán objeto de odio por parte de las naciones por causa de mi nombre. Entonces también a muchos se les hará tropezar, y se traicionarán unos a otros y se odiarán unos a otros. Y muchos falsos profetas se levantarán y extraviarán a muchos; y por el aumento del desafuero se enfriará el amor en la mayor parte. Pero el que haya aguantado hasta el fin es el que será salvo.” (Mateo 24:9-13)
La edición del 1de Marzo afirma que Malaquías 3:1 se cumplió en 1918, cuando supuestamente Cristo volvió y vino a poner orden en la casa de su Padre. El versículo lee: “¡Miren!, envío a mi mensajero, y Él tiene que despejar un camino delante de mí. y súbitamente vendrá a Su templo el Señor verdadero, a quien ustedes buscan, y el Mensajero del Pacto en quien se deleitan. ¡Miren! Ciertamente vendrá, ha dicho Jehová de los ejércitos.”
La Sociedad Watchtower trata de reconciliar su afirmación que el juicio se llevo a cabo en el pasado y al mismo tiempo nos dice que este juicio continúa aún hasta nuestros días. No obstante, unos versículos después Malaquías describe la inspección repentina del templo espiritual de Dios por parte de Jesús y dice: “Y ciertamente me acercaré a ustedes para el juico, y ciertamente llegaré a ser testigo veloz contra los hechiceros, y contra los adúlteros, y contra los que juran falsamente, y contra los que actúan fraudulentamente con el salario del trabajador asalariado, con la viuda y con el huérfano de padre, y los que apartan al residente forastero, mientras no me han temido, ha dicho Jehová de los ejércitos.”
Ahora debemos hacernos las siguientes preguntas: Si Jesús llega a ser un testigo veloz contra todos los malhechores que hay dentro de la casa de Dios cuando inspecciona el templo, y esta inspección supuestamente sucedió hace más de ochenta años, ¿Por que aún la organización padece de todas las cosas que ya hemos mencionado? Sí, ¿Por qué aún permite Jesús que los llamados huérfanos de padre sean violados y abusados por perversos hombres y por qué permite que a estos huérfanos se les niegue justicia aún por parte de aquellos que supuestamente deben velar por ellos?
Si Jesús ya ha puesto orden en la casa de su Padre y ha refinado a sus habitantes, ¿Por qué aún tolera las hechicerías de Jezabel de las que nos habla el libro de Revelación?, ¿Por qué su congregación continúa prostituyéndose con la ONU?, ¿De qué manera podemos decir que Jesús se ha convertido en un “testigo veloz” en contra de las fechorías que se comenten dentro de la organización?
Es obvio que Él todavía no lo ha hecho – Aún no lo ha hecho-.
El comentario de la próxima semana continuará tratando el tema de la venida de Jesús.