Martes 22 de diciembre
Oirás una palabra detrás de ti que diga: “Este es el camino. Anden en él” (Is. 30:21).
Claro, no escuchamos la voz de Dios desde el cielo. Pero nos da instrucción mediante su Palabra escrita, la Biblia. Además, el espíritu santo impulsa al “mayordomo fiel” a que continúe dándonos alimento espiritual, como publicaciones impresas, en Internet, en video y en audio (Luc. 12:42). ¿Verdad que recibimos muchísimo alimento espiritual? Que las palabras de Jehová, registradas en la Biblia, nos hagan confiar en que tiene todo bajo control y en que reparará cualquier daño que nos causen Satanás y su mundo malvado. Resolvámonos a escuchar con atención la voz de Jehová. Si lo hacemos, lograremos aguantar cualquier dificultad presente o futura. La Biblia nos recuerda: “Ustedes tienen necesidad de aguante, para que, después que hayan hecho la voluntad de Dios, reciban el cumplimiento de la promesa” (Heb. 10:36). w19.03 13 párrs. 17, 18
Desearía que los maestros y redactores que trabajan para la Watchtower fueran honestos. La ignorancia es remediable, pero la ceguera voluntaria es algo grave.
Indudablemente, los maestros de Betel han leído Isaías muchas veces. Incluso, hace 20 años, publicaron Las profecías de Isaías, una luz para toda la humanidad, una obra que aparentemente explica el significado de las profecías de ese enigmático libro. Siendo eso cierto, ¿cómo es que continúan afirmando que lo que se menciona de escuchar una palabra detrás de uno se cumple cuando leemos la Biblia o la literatura de la Sociedad?
En las Escrituras, el contexto lo es todo. Y el contexto del pasaje usado en el texto diario de hoy tiene que ver con la gran tribulación y la presencia visible de Jesucristo. Esto es lo que realmente dice la Biblia: “Cuando el pueblo viva en Sion, en Jerusalén, tú de seguro no llorarás más. Cuando grites por ayuda, él sin falta te mostrará favor; te responderá en cuanto te escuche. Aunque Jehová te dará angustia como si fuera pan y opresión como si fuera agua, él, tu Gran Instructor, ya no se esconderá. Verás a tu Gran Instructor con tus propios ojos. Y, en caso de que te desvíes a la derecha o a la izquierda, oirás con tus propios oídos estas palabras detrás de ti: ‘Este es el camino. Anda en él’”.
He aquí una pregunta para aquellos testigos de Jehová que se atreven a leer este blog: dado el hecho de que la Organización se jacta de proporcionarles a ustedes abundancia de alimento espiritual e incluso asevera haber restaurado la adoración pura, ¿de qué manera está alimentando Jehová a su pueblo con angustia como si fuera pan y haciéndolos beber el agua de la opresión? ¿No es ese el escenario en el que Jehová se revelará a sí mismo como el Gran Instructor?
Aquí hay otra pregunta: la Sociedad se jacta de que Babilonia la Grande no tiene poder para suprimir a la poderosa organización de Jehová, sin embargo, debido a la influencia de la Iglesia ortodoxa, los testigos de Jehová han sido proscritos por completo en toda la Federación Rusa. ¿Ha respondido Jehová de manera notable —tal como nos indica la profecía— a los gritos de ayuda de los cristianos rusos? ¿Proporciona realmente el leer la Biblia la guía necesaria para contrarrestar esa opresión?
Además, ¿puede el leer las Escrituras o el material proporcionado por el llamado “mayordomo fiel” producir el fenómeno en el que vemos a Jehová con nuestros propios ojos?
Por supuesto, los que dirigen a la Sociedad se ven obligados a afirmar que ver a Dios con nuestros propios ojos es algo metafórico, espiritual. El Todopoderoso estaba utilizando una hipérbole. Después de todo, ningún hombre puede verlo y seguir viviendo. No obstante, con ese punto de vista solo ponen al descubierto aún más su ceguera.
Betel ha inventado una extensa maraña de mentiras y, de hecho, toda la Organización se sostiene en una falacia, el cuento falso ingeniosamente elaborado de que la presencia invisible de Jesús comenzó en 1914. La expresión “presencia invisible” en sí misma es absurda. Jesús siempre ha estado presente de manera invisible. ¿No les prometió a sus discípulos que estaría con ellos todos los días hasta la conclusión del sistema y que donde dos o más estuvieran reunidos en su nombre, él estaría allí en medio de ellos? Los líderes de los testigos de Jehová han creado un engaño y se aferran a él.
Por lo tanto, no es de extrañar que la Watchtower no tenga prácticamente nada que decir sobre la épica revelación y manifestación de Jesús. Cualquier examen serio de las Escrituras revelaría que la manifestación, revelación y parusía de Cristo son lo mismo. Y esta verdad fue comunicada a todos los miembros del Cuerpo Gobernante y a todas las sucursales angloparlantes de la Sociedad hace más de 15 años al enviarles el libro Jehová mismo ha llegado a ser rey.
Obviamente, ningún hombre puede ver a Dios. Sin embargo, después de su resurrección, Jesús se manifestó, y no solo en la carne. El judío llamado Saulo vio un destello de Cristo en su gloria y el encuentro lo dejó ciego durante tres días.
Es cierto que Jehová es el Gran Instructor. Pero Isaías nos presentó al Hijo de Dios, llamándolo Maravilloso Consejero. Y, claro está, cuando Jesús estuvo en la tierra era conocido como el Maestro. En vista de eso, la revelación del Gran Instructor tiene que ver con la manifestación de Jesucristo en ese papel por parte de Jehová.
Se ha adaptado al propósito de Jehová permitir que la Sociedad ejerza una influencia engañosa y sea un instrumento en la operación de Satanás que, como predijo Pablo, declararía falsamente que la presencia de Cristo había comenzado y que el día de Jehová estaba aquí. Jesús podría haber disipado fácilmente el engaño de la parusía invisible, pero ese es el medio por el cual se ha mantenido oculto. La venida de Cristo provocará el colapso total de los cuentos falsos ingeniosamente elaborados de la Watchtower, los cuales son muchos.
De hecho, en lo que respecta al contexto, el mismo capítulo de Isaías nos habla de eso al mencionar lo siguiente: “Ellos les dicen a los videntes ‘No vean’ y a los hombres de visiones ‘No nos cuenten visiones que digan la verdad. Dígannos cosas halagadoras; profeticen falsas ilusiones. Apártense del camino; desvíense de la senda. Dejen de ponernos delante al Santo de Israel’. Por lo tanto, esto es lo que dice el Santo de Israel: ‘Ya que ustedes rechazan estas palabras y confían en el fraude y en el engaño, y se apoyan en ellos, este error será para ustedes como un muro agrietado, como un muro alto que está encorvado y a punto de caerse. De repente, en un instante, se derrumbará. Se romperá igual que un jarro grande de alfarero, quedará tan destrozado que ninguno de sus pedazos servirá para sacar brasas del fuego o recoger agua de un charco’” (Isaías 30:10-14).
Al Cuerpo Gobernante no le interesan las “visiones que digan la verdad”. Son “hijos que engañan”. Ellos han inventado sus propias ilusiones engañosas y halagadoras, como los fraudes mencionados muchas veces en esta página acerca del paraíso espiritual y la tontería blasfema de que la adoración pura ha sido por fin restaurada.
Empero, su muro enlucido con cal ya está abultado, doblado bajo el peso de un siglo de fraudes y engaños. Nadie sabe el día ni la hora, pero cuando Cristo regrese, el muro de mentiras que la Watchtower ha erigido y en el que confían ardientemente se derrumbará.
Entonces los sobrevivientes escucharán la voz del Gran Instructor, no, no emanando de las páginas de la Biblia, ni tampoco de nada que la Watchtower publique o haya publicado. Como también predijo Isaías, en la parte final de los días la montaña de Jehová será elevada y la ley saldrá de Sion. Si la ley y la palabra de Jehová saldrán de Jerusalén en ese momento, eso significa que ese será un acontecimiento extraordinario. Siempre hemos tenido la Biblia y las leyes que contiene. La palabra y la ley que emanarán del monte de Jehová, es decir, del Reino de Cristo, serán extrabíblicas.
Dios no está limitado a hablar únicamente a través de las palabras escritas en un libro. Es completamente capaz de comunicarse directamente con los seres humanos, tal como lo hizo en el pasado en muchas ocasiones y de diversas formas.
El retorno de Cristo lo revelará como el Gran Instructor de parte del Todopoderoso que disipará el engaño que actualmente tiene cautivos a los testigos de Jehová: “Y, el día que Jehová vende la herida de su pueblo y sane la grave herida del golpe que él le dio, la luz de la luna llena será como la luz del sol y la luz del sol se hará siete veces más intensa, como la luz de siete días” (Isaías 30:26).